LUGAR DONDE APARECIERON LOS RESTOS DE JUAN DENÍS, DESPUÉS DE 40 DÍAS DE INTENSA BÚSQUEDA.
Elegía a la muerte del joven Juan Denís
“A UNA VIDA TRUNCADA EN
JUVENTUD”
A tu lado me sentí
insignificante,
Tu majestad me
impresionó, el silencio,
El viento luchando
contra las rocas
El crujido de los
guijarros bajo mis botas.
Allí en el silencio sobrecogedor
del valle,
A la sombra de Peña Vieja,
Al final de la Canal
del Vidrio,
No lejos de Fuente Dé
En los Picos de Europa
Reposa tu espíritu
inquieto y aventurero.
Tu última mirada al
valle
Mientras tu vida se
escapaba
Entre los dedos de tus
manos
Como agua cristalina al
acercarla
A los labios del caminante
fatigado.
Tus ojos vieron por
última vez la luz,
Luego la noche despeñó
al día
Tus pupilas se cerraron
en hilos plateados
Que surcaron tu rostro
en saltos acompasados.
Lluvia de estrellas te
acompañaron
En tu camino etéreo
hacia el infinito,
Mientras nuestros corazones
lloraban
Tu ausencia de una vida
fugaz
33 primaveras con sus
días de risas
Llantos, alegrías,
súplicas y esperanzas.
Aún resuenan en mis
oídos el cerrar la puerta,
Eran las 7.30 de amaña
del 3 junio del 2006
Cuando abandonaste la
casa a donde
Nunca más volverías.
Allí en el silencio de
la habitación
Quedaron tus cosas
queridas, tus fotos,
Pinturas, secretos y silencios.
Lluvias tras los
cristales,
Lamentos del viento
entre tus plantas,
El trueno ronco,
funesto
Acompasado por el
granizo del duro invierno,
Para revivir las
primavera que tantas veces
En tus fotos dejaste
reflejada.
Tus máquinas y pinceles lloran en silencio
Tu prolongada ausencia ya
de polvo su grito se va apagando,
Donde el lamento se va
poco a poco ahogando,
Tus cuadros y fotos
envejecen casi olvidados
En rincones y
estanterías de tu habitación,
En placa dorada donde tus restos
Fueron hallados después
de 40 días
De Búsquedas infructuosas
y de llantos.
Hoy en ese lugar de
funesto recuerdo
Una placa dorada, clavada en la roca abigarrada
Tan solo reza: En
recuerdo a Juan Denis González Martínez
Con el cariño de
padres, familiares y amigos
Que no te olvidan,
descasa en Paz. 13 de junio del 2006.
Todos los años en el
otoño no te faltará un ramo de flores,
Mientras tu madre y yo podamos
llegar hasta el lugar,
De tan triste recuerdo
donde tu espíritu
Descansa en la eterna
contemplación de la majestad de la
montaña
Y las velas
parpadeantes de las intensas estrellas.
Querido y nunca
olvidado Juan Denis, descansa en paz.
Autor: José Ángel Miyares Valle
